EVA AL DESNUDO

  Una gala de vértigo. Ya que no aparece por ningún lado tendremos esa amabilidad. Discurrió a un ritmo frenético y aunque no fue de excesivas sorpresas al menos estuvo entretenida y nos mantuvo expectantes durante todo su desarrollo. Muchas cosas para contar y muy pocas para debatir, que por lo visto está mal visto. Me pareció bien que el programa pusiese en la tesitura de marcharse si así lo deseaba a Iván, más que nada por respeto a esos casi sesenta mil aspirantes a entrar, o a las dos que lo rozaron desde la rueda y se quedaron con la miel en los labios, y también porqué no decirlo a todos los seguidores del programa. Habría estado bien, entre otras cosas porque habría dejado en entredicho las pautas que se rigen a la hora de seleccionar a los concursantes. Después de un buen trecho de mutuo peloteo, casi me echo a llorar al oir aquello de lo que Iván amaba al programa desde siempre,  de verse acorralado ante sus  propias mentiras y tras haber quedado en evidencia su extraordinaria  fantasía, inventa una detrás de otra sin saber ya a lo que recurrir, nos regaló un discurso de arrepentimiento espontáneo y de sinceridad supina que casi nos obliga a no abandonar el pañuelo.

  El tempo llevaba un ritmo frenético como dije, y casi sin darnos tiempo nos encontramos al mismo tiempo con la entrada de Eva y la expulsión de Edo. Un juego dentro del juego nos anunciaron y así fue, Eva, la novia de Danny por si alguien a estas alturas no lo sabía y como ya todos preveíamos entraba  en la casa. Gracias por el guiño de pensar siquiera que podría estar pactado, hay que leer más y mejor, y sobre todo ampliar miras ya que la obcecación solo genera dudas. Entró como decía Eva, con cómplices y condiciones para quedarse, un juego en el que tiene que mantener su anonimato, al menos que nadie de la casa se cosque de quien es en realidad. Un inciso para todos aquellos que durante una semana han estado votando para que se fuese Susana solo decirles que lo siento, pero es lo que hay. No se habría entendido el juego sin ella. Hay que inventarse una personalidad nueva, cambiar de nombre, de profesión, en fin todo aquello que fuese necesario para despistarlos y que no creyesen en ningún momento quien era, como un juego, ¿lo había dicho ya?. Un juego divertido de esos que se nos ocurren cuando después de la merienda y sentados en el parque  decidimos llevar a cabo para matar el aburrimiento, “se me ha ocurrido una idea” decíamos….

  Otro inciso. Éste para mayores. Si hay alguien en la sala que no hubiese pensado mínimamente que en cuánto Susana se acercase a Danny y viera su reacción con Eva al lado, se daría cuenta automáticamente de lo que estaba pasando que levante la mano, o eso o poner a prueba la capacidad de Susana para ser la tonta oficial de la edición. Solo para listos, el resto de concursantes ni cuenta, ni las reacciones de Danny ni el riesgo de meter a una concursante condicionada a ser, pensar, decir, expresar lo que ella misma decida en cada momento a riesgo de ser expulsada. Ante todo naturalidad, y ojo con los demás, que la amenaza sobrevuela sobre sus cabezas.  Solo tuvo sentido el minuto antes de entrar, “Me has hecho mucho daño” “Te escribía todos los días” “Lo sé, pero he visto cosas que me han hecho mucho daño” “yo aquí necesito cariño”. Danny era el hombre de hielo, cuando entraron los cómplices y describían la mentira, él miraba para otro lado y ni hacia caso, después nos dijo que estaba oyendo como describían a su novia.

 Fue divertido ver a Eva haciendo el paripé y sin saber donde meterse, ni lo que decir ni como comportarse, intentando agradar a todo el mundo y hacerse la graciosa inocente, pero más lo fue ver a las cámaras detrás de los gestos de Danny y observar como con un ojo controlaba los movimientos de Eva y con el otro vigilaba a Susana, o esos planos cortos de Susana en busca de algún punto de fricción que le diera la respuesta a lo que estaba pasando allí. Lo llaman tener la mosca en la oreja. Lástima que a los cinco minutos toda la casa supiera quien era Ana en realidad. Pero ésta vez no hay piruleta como con Lys, así que todos a callar y ya veremos a ver lo que pasa. Supongo que cuando se juega a estos juegos, unos ganan y otros pierden, por tanto y pesar de todo, no me atrevo a asegurar que Leti, Miriam y Danny ya sean los próximos nominados, sobre todo por la claridad concisa y meridiana con que nos explicaron sus normas.

  Pero es Gran Hermano, y tocaba expulsión. Salió Edo, el favorito a salir en absolutamente todas las encuestas,  con un 42% de los votos, nos quedamos al final con las ganas de saber los otros porcentajes. Estaba cantada su expulsión, aunque imagino que más de uno se quedaría de piedra al oir su nombre, no sé porqué. Solo era un mueble prescindible que apenas contaba para nadie, creo que ni para votar. Es la magia, y yo lo agradezco, porque a pesar de su discurso emotivo que casi nos ablanda el corazón como hizo con la banda de hipócritas que una semana antes le habían nominado en masa, prefiero siempre en la casa a una Argi y a una Susana que cada vez ganan más, al menos sin estúpidas dobleces.

  Y sí, todos los que seguimos Gran Hermano solemos ver las galas, y algunos hasta nos atrevemos a comentarlas, pensaba que no era una exclusividad. La diferencia seguramente está en la aportación que cada uno hacemos al IRPF y sus malditas deducciones que siempre había sido un buen sinónimo de libertad, no es lo mismo ser autónomo ya que esos lo tienen bastante jodido, será el precio a su independencia y a decir o hacer lo que le parece en todo momento sin hipotecas ni adoraciones para mantener la nómina o una buena promoción. Son muchos años como para que sorprendan según que cosas, es lo que tiene el programa, los que lo llevan, los que participan, los que leen o escriben, se enganchan o desenganchan, que a veces las cosas cambian, y otras veces no.  Las cosas buenas hay que decirlas siempre, pero las malas también, y en algún momento habrá que leer no solo lo que uno escribe, sino también lo que escriben los demás, vamos digo yo. Y más, si los demás, lo están haciendo en tu propia casa.