UNA REALIDAD PARALELA

  Decía ayer que los que seguimos GH desde hace mucho sabemos que éste siempre aparece cuando menos lo esperas y que en cualquier momento puede surgir algo de esa chistera mágica que posee que nos pueda pillar descolocados. Eso mismo sucedió anoche a eso de las cinco de la madrugada cuando todos los que a esas horas veíamos  el veinticuatro horas asistíamos incrédulos a uno de esos episodios surrealistas que surgen de vez en cuando, he de felicitar primero al realizador que no nos privó ni un solo instante de todo lo que estaba pasando en la casa y nos llevaba de una habitación a otra sin dudarlo para que asistiéramos a todo.

  El ver a Álvaro llorando y haciendo su maleta sin decir palabra y tan solo consolado por una Desi que no paraba  de pedirle perdón llorando también fue uno de los momentos más tensos vividos en mucho tiempo. No sabíamos lo que estaba pasando en la otra habitación desde donde procedían las voces cada vez más exaltadas, se oían a los gemelos sin parar de gritar y algunos gritos de fondo hasta que el realizador nos mandó la cámara al jardín donde pudimos ver a una Sonia desconsolada y compungida diciéndole a Saray que ella no tenía la culpa de nada que solo era culpa suya por haber confiado en un niñato que no tiene dos dedos  de frente, insistiéndole que no era la primera vez que le pasaba y que ya estaba harta desde hacia mucho tiempo, que esté tranquila que no ha sido culpa suya.

  En la habitación de los gritos, los gemelos seguían enzarzados con un Kristian que había perdido totalmente los papeles, desencajado y sin parar de moverse haciéndole frente a la agresividad de los gemelos que le atacaban a dúo llamándole traidor y diciéndole que sabían lo que iba a pasar desde hacía mucho tiempo, el momento fue extremadamente violento porque ninguno se cortaba al levantar la voz. Susana se había enzarzado con Raki mientras ésta no paraba de llorar,   estaba siendo abrazada por Yessica, por lo visto se había derrumbado tras las duras palabras de la murciana a la que jamás habíamos visto así, estaba irreconocible. Iván sujetaba a Kristian al que se le veía bastante alterado mientras Nacho intentaba sin mucho éxito que los gemelos entraran en razón. Todo se había ido de las manos.

 Por lo visto y según pudimos deducir, durante la siesta  un grupo formado por Sonia, Kris, Raki y Desi habían decidido pactar las nominaciones del jueves e ir a por los gemelos y a por Susana, pero Desi después se lo contó a Álvaro y éste se lo había dicho a Susana que se pilló un mosqueo del quince, cuando ésta se lo dijo a los gemelos se formó la mundial. Desi se había enfadado con Álvaro y le llamó chivato de mierda y después se lo dijo a Kristian que también le dijo de todo, de ahí el rebote del madrileño que perdió los papeles diciendo que se quería marchar de allí, que no aguantaba más.

  Según he podido leer en algún comentario,  por lo visto antes de que ocurriese todo eso, Saray se había acercado a Kristian para preguntarle lo que le pasaba porque lo veía un poco mosqueado, éste le había contestado lo de siempre que nada, cosas suyas, y Saray se acercó a darle un abrazo metiéndole las manos por dentro del suéter ancho de Kristian y en contacto con la espalda, la casualidad quiso que justo en ese momento entrase en la habitación Sonia y les viera en una postura un poco extraña, Sonia se quedó de piedra viendo como Kristian que en ese momento estaba de frente hacia ella se desentendía de manera brusca de Saray y salía corriendo detrás de Sonia, ni te me acerques fue por lo visto lo que le dijo Sonia a Kristian, ni que se le acercara ni que le dirigiera más la palabra.

  Por lo visto había estado toda la tarde calentita entre unas cosas y otras, y al final, por la noche estalló todo. Aquello era indescriptible, la tensión los que estábamos viendo el veinticuatro la podíamos palpar, es muy difícil describir los hechos sin verlos, esperemos que pronto aparezcan los vídeos ya que nunca se había visto la casa en esa tesitura, por un momento llegué a pensar que de ahí no solo se iría Álvaro sino que alguno más podría ser expulsado, porque tenía visos de acabar mal. El súper llamó al confesionario a los gemelos, después a Kristian, luego a Susana y después a Desi, y a partir de ahí ya si que nos pusieron el ojo. Lamentable me atrevería a describir el incidente. Me hubiese gustado relatar una noche cualquiera de esas que te los encuentras a eso de las tres de la mañana a todos tirados por el sofá, recenando galletas con nocilla y repasando los autores de los cuadros una y otra vez en un bucle interminable o diciendo tonterías de niños de instituto hasta que a alguno se le ocurriese decir que se iba a acostar ya, pero la actualidad manda, y en éste caso la fantasía también.

  Gran Hermano es así, que cuando menos lo esperas salta la chispa. Entiendo a todos aquellos decepcionados por la realidad que nos envuelve, es como ese pensamiento común que más nos une en momentos como el que vivimos tras el jueves y que no tiene réplica, si antes la casa estaba mal ahora está peor. No paso por las inventivas, ni siquiera por la retórica de una vida que no existe dentro de esos muros, tanta imaginación es una como la otra pero la evidencia nos consume a través no ya solo de las horas sino de los días. Comprendo el sentir generalizado de al menos sentirte enganchado a alguien que te palie esos infumables momentos o el deseo al menos la intención de entrar en la pura competitividad de que ganase o que al menos no ganasen los otros, era el hilo que nos mantenía unidos al concurso, esa resistencia a no luchar, a permitir que quien al menos no se lo merece se lleve el premio, esa razón que nos unía a permanecer enganchados, y entiendo la impotencia que se siente cuando el único aliciente te lo secuestran y te lo quitan porque pasas de entender poco a no entender nada.

  Hay gente que apela al sentido del humor, yo he de reconocer que no valgo para eso, cuando la injusticia lo pervierte soy uno de los que se rebelan y quizás más te motive para seguir luchando aunque sea inventando. Lo que nunca voy a hacer será intentar cambiar la realidad y volver a esas épocas de fantasía donde todo parece de colores o de dibujos animados. Hay maneras de luchar contra ella por muy pequeñas e inservibles que parezcan y desde aquí recuerdo que algún hashtag lleva siendo TT desde hace cinco días seguidos, que la cuenta de Argi ha pasado en apenas tres días de tener diez mil seguidores a tener cien mil, y en eso nada influye el hecho de que hoy o el jueves vaya a ir al debate o a que le hagan una entrevista, es la razón de la gente la que lo mueve, la injusticia en sí quien mueve los hilos de forma estrictamente personal, cada uno que escribe un comentario o que le aprieta al botón de seguir sabe porqué lo hace y porqué razones. Todos somos libres de pensar o de mirar hacia otro lado, de seguir o de parar, no hay retorno que valga pero que nadie piense en ningún momento que todo esto esté siendo inútil.