MESCOLANZA

   Dejaremos la entrada de ayer en unos meros juegos de seducción donde nadie se atreve de verdad a dar un paso adelante. Falta de atrevimiento o falta de verdad en cualquiera de los cuatro protagonistas. Los primos son unos personajes tristes para lo que la productora quiere, Yoli es la única que parece decidida y Azahara me da la impresión que no ha ido allí a esa función, es un papel que no le va y a veces tengo la sensación de que está un poco obligada, cada vez me desconcierta más la malagueña ya que parece un comodín de la organización que cumple el papel que se le encomienda, como una infiltrada. Valiente a veces, nos ha mostrado esa personalidad capaz de enfrentarse a un Fran intocable cuando este aún disfrutaba de los privilegios de la ignorancia de los concursantes. Lista, como para inventarse el juego de claves, metódica para saber jugar con aplomo la triste historia de su novio mandando las pelotas de tenis al jardín, y sin embargo muy comedida cuando su principal misión antitaurina solo la saca a regañadientes y de esa forma tan liviana.

    Un personaje extraño, a ella parece que le ocurre todo lo importante, no hay palo o trama que no le confiera y sin embargo parece que todo pasa de refilón y sin despeinarse lo más mínimo, y lo que es peor sin tener nunca consecuencias. La fobia social le dio un plus de confianza inicial y de respeto, sus problemas alimenticios uno de exclusividad, su silencio y su misterio parece que siempre están justificados, sus rarezas o su inmovilismo parece consentido o autorizado, ahora vive un juego de seducción con el guaperas de la casa en una relación cuasi mística y que nadie se atreve a discutir, todo lo que haga parece que está bien hecho, sea bueno o malo. Nunca se implica más allá de lo permitido. Estoy confundido. Todo no puede ser tan limpio en esta concursante, algo me pita y me hace sospechar. Su falta de exposición me mosquea y su impunidad en casi todos los puntos escabrosos de la casa de la que siempre suele salir indemne me hace dudar. Por eso, dudo de que lo de ayer sea una simple lectura superficial o haya algo más. Lo mismo algún día tenemos que encuadrarla en ese “otro lado de la cama”.

   Me cuesta trabajo decirlo, pero parece una ganadora fabricada a la medida y haciendo un concurso a la carta. Pero hoy toca hablar de los otros, de los plebeyos y sobre todo de las consecuencias de esa “bronca” entre Fran y Alejandra, de la que como todos vimos salió triunfante la manchega alta asestando un golpe definitivo en el tablero y mostrando sus credenciales para la final. La cronología de lo ocurrido ya está suficientemente explicado por nuestros comentaristas, cada uno desde el cristal propio, claro está, pero están los vídeos para confirmar o desmentir todo, lo demás es pura política, legítima dentro del juego en que nos movemos y cada cual se llevará el ascua a su sardina, nunca mejor dicho. Prefiero confiar en lo que veo, y eso me permite nombrar a Alejandra y a Omar como claros vencedores desde mi humilde cristal. Las actuaciones de Fran y de Paula dejaron mucho que desear para supuestamente un episodio tan significativo. Pero en esta edición no existe punzada sin hilo, o al menos me lo parece a mí.

   Es evidente la separación de Luis y Paula del resto de la casa, el revés sufrido por el torero ante Omar después de la crisis del viernes lo ha dejado tocado, y a ambos a los pies de los caballos, Fran es malo pero no tonto, y sabedor de la falta de apoyos y la soledad en que cada vez más está cayendo su acompañante quien refugiado en una Paula cada vez más arrastrada a su destino, decidió que algo había que hacer. Alejandra era la clave, ya que su unión con Omar estaba afianzándose hasta límites intolerables para el apoderado. Sólo encendió la chispa, él ya se sabe amortizado pero no así su pupilo y del desgaste de Omar, via Alejandra, podría venir la redención pública del torero. No le salió bien la jugada, y aunque él directamente no entró en el juego, sí lo hizo Paula y de una manera absurda e incompetente, supongo que buscando una vez más su cota de protagonismo, pero sin saberla administrar, de ahí que saliese tocada del envite. Desde luego, la jugada le salió mal no, lo siguiente, doble motivo, no solo consiguió su objetivo de dejar en evidencia a la nueva aliada de Omar, sino que la gente dubitativa, viendo lo penoso de la escena terminase tomando partida por el bando contrario como fue el caso de Juanma.

   Lo que ellos no se esperan, ya he dicho muchas veces que estamos delante de la peor edición de jugadores, son todos pésimos... es que esa resurrección del torero no les va a venir por el lado de la provocación como quiere insistir Fran, sino por la inercia del propio programa que esta noche va a dar a Loli con sus huesos en el plató con Mercedes Milá para que le eche las cartas. Luis volverá, y lo hará convencido de que la audiencia le quiere y le habrá dado la razón en su guerra con Omar, esto hará resucitar a su vez a una Paula moribunda que volverá a cargar sus pilas y dejará al otro bando expectante. Seguramente, como siempre ocurre, leerán mal las señales, y tendremos que volver a empezar todo de nuevo. Lo de Loli no habrá que buscarle muchas lecturas, siempre habrá tiempo para ello, por lo pronto hará confiarse al bando paulista, nuevo error.

    Si alguien está saliendo reforzado de toda esta guerra entre Luis y Paula contra Omar, esa es Alejandra. La manchega está sacando todo su carácter y no está evitando el enfrentamiento directo, bien contra Luis, contra Fran o contra Paula, armada de razones, con la experiencia del rechazo adquirido en lo que va de concurso y la fe en lo que hace se está convirtiendo en esa concursante que mucha gente busca sin necesidad de cotas absurdas ni vídeos mal editados, irradia frescura y transparencia, denota personalidad e intenta disfrutar de cada momento, es valiente y atrevida. Justo está mostrando la dosis de conflicto que su oponente natural, Paula, solo se reserva para sus momentos puntuales, no está eludiendo el cuerpo a cuerpo y le está plantando cara, ahora sí, sin miedos ni medias tintas. Este resurgir está haciendo replanteanse en Paula muchas cosas, veremos en que acaba esta pérdida de protagonismo, su relación con Luis bien podría darnos la primera pista. Esperaremos.

   Lo cierto, es que tras el fracaso de intento por parte de la organización de unir de nuevo a Omar y Paula, y desistiendo definitivamente de la carpeta de las dos parejas del lado bueno de la cama, el argumento no tiene más remedio que resetearse y volver a intentar nuevas tramas. La casa está susceptible y en un punto álgido de ebullición, a punta de caramelo para que algo polémico suceda y mis temores descritos ayer en un comentario no deberían dejarse de lado, todo por momentos parece demasiado previsible. Por lo pronto, disfrutemos de todo este interesante... batiburrillo.