PAREJAS EQUIVOCADAS

  Anoche tuvo lugar en la casa una especie de fiesta francesa donde uno de los atractivos fue esa especie de intercambio de poemas entre parejas. A la hora de decidir a quien escribirle llamó la atención que Susana  eligiese a Argi en vez de a Gonzalo, lo que acarreó como era previsible un ligero mosqueo del sevillano. Entre el grueso de elecciones previsibles, Sonia-Kris, Igor-Argi, Carlos-Kris, etc, convendría señalar que mientras Adri eligió a Jessi, ésta prefirió a Anabel, nada nuevo ni especialmente significativo salvo que me dio por pensar en el trasfondo de la edición que muchas veces hemos criticado desde aquí, que no se me enfade nadie, que las críticas aquí siempre son constructivas y este año parece haber gente muy susceptible, de ser una edición enfocada para parejas. La selección del casting, la entrada de nuevos concursantes nos da pié a pensar que todo el argumento está preparado para que broten las tramas  desde las paridades en vez de individualidades.

  Es curioso el camino divergente que existe entre lo que emana desde la casa y por donde van los tiros de la audiencia, mientras desde dentro el contenido fluye de manera abundante, en esto creo que la productora ha acertado, puesto que se les está administrando una cantidad enorme de motivos televisivos, resulta chocante que la audiencia por otro lado está premiando más o castigando en todo caso  argumentos individuales. Es como si se hubiesen elegido caminos paralelos, una especie de rebeldía que tensa la cuerda y que en compensación mantiene el concurso en un justo término medio. Argi está siendo protagonista en la medida que soporta su propio status de manera individual, mientras que la primera pareja formada en la casa,  Kris y Sonia, algunos percibimos cierta tendencia descendente.

  El carpeterismo ha tenido éxito en las últimas ediciones porque ha sabido elegir a sus representantes y éstos le han devuelto con argumentos sus expectativas, cosa que éste año  parece como si éste movimiento no estuviera o bien representado o bien argumentado; en cada edición ha brotado de la nada de manera espontánea y uno tiene la sensación al ver a sus representantes este año como si hubiese venido impuesto y la pareja elegida no termine de estar a la altura de las circunstancias. Seguramente, si se hubiesen manejado a efectos individuales ambos hubiesen tenido un mayor éxito que como pareja. Nos encontramos ante la tesis de un posible error de concepto en el que de manera burda hubiesen caído ambos protagonistas.

Si todo fuese calculado  y sus aspiraciones desde antes de entrar hubiesen sido esas el error en el concurso habría sido monumental a tenor de las críticas que se están viendo. 

  Si todo hubiese sido natural, es evidente que sus protagonistas no cumplen las expectativas, lo que me da lugar a pensar que efectivamente nos encontramos ante la edición de las parejas, pero posiblemente de las parejas equivocadas. Uno esto al ejemplo de la elección de los poemas del principio de la entrada. Sonia bien podría haber sido una buena concursante, o Kristian, a nivel individual, pero restan muchos puntos ambos en equipo sacándoles lo peor de cada uno en función de su propia relación, se les ve muy dependientes y completamente artificiales amén de estar tomando decisiones totalmente equivocadas con respecto al concurso.

  Ambos han apostado al doble o nada olvidándose de matices que les podría estar llevando al abismo. Es una consecuencia del juego elegido de manera voluntaria que en nada tiene que ver con el amor que ellos mismos dicen que se profesan. Se trata de un amor tóxico que ambos no están sabiendo conjugar con su verdadera prioridad que siempre ha sido el concurso. Si fuese verdadero lo están envenenando con su juego y sus aspiraciones individuales, y si no fuese así lo están finiquitando día tras día con el engaño a quienes confiaron en ellos y sobreactuando de manera infantil sabiendo que la gente no suele ser tonta en éstos casos.

  No solo se trata del ejemplo, tenemos otros protagonistas como puede ser Susana que está dando la sensación de no saber elegir bien a sus parejas, al contrario del caso anterior, ella no sabe actuar de manera individual, comete el error de necesitar estar protegida, aquí tengo dudas, estar protegida o proteger, no sabría muy bien definirme ante la actitud de esta concursante, es evidente que gana muchos enteros cuando se la ve a su aire e independiente, pero choca esa necesidad de “alguien”, Danny, Gonzalo, Argi, supongo que será una necesidad vital para la vida dentro de la casa pero ésta nunca debe venir impuesta como le pasó a la anterior pareja, esa necesidad debe fluir de manera natural y llevarte a su justo término y a su sitio preciso. Por eso su concurso parece una noria que oscila entre las buenas y las malas decisiones.

  Adri está como loco por emparejarse, primero lo intentó con Argi, ahora lo está intentando con Jessi de manera desesperada y totalmente errónea rozando casi el acoso, insiste como si le fuese la vida o el concurso en ello, da la sensación que es algo fundamental para él y que su estancia dependiese del sí de la valenciana. Esta urgencia y la forma un poco chusca de llevar a cabo ese deseo está provocando no solo en Jessi sino en las personas que lo están observando un claro rechazo porque destila muy poca credibilidad. Está forzando una situación que debe fluir de manera natural y está llevando su empecinamiento a una situación límite que le puede acarrear bastante controversia. Jessi, lo ha dejado claro, quiere concursar de manera individual y si en algún momento surge algo, no lo evitará, pero de ahí a venirle impuesto por estrictos deseos de un guión a capricho va un trecho, su concurso está siendo condicionado por Adri de manera casi obligada y se tiene la impresión que no está siendo todo lo libre que quisiera. Está teniendo una buena oportunidad para dejar claro su concurso pero tampoco se atreve mucho, quizás por su carácter, quizás por el miedo que suponer sentirte como “nueva” en un grupo bastante arraigado.

  Todo parecen tramas perfectamente guionizadas que dan contenido al concurso, éste se alimenta de sus ramificaciones y para que obviarlo, resulta mucho más interesante, entretenido y rentable el mundo de las parejas equivocadas. Al menos, tienen mucho más contenido.