LOS MUNDOS DE YUPI

   Ya hemos hablado este fin de semana de las impresiones de cara a la final y las sensaciones vividas durante las primeras horas. Anoche se llevó a cabo el último debate de la edición, sin contar el que se llevará a cabo el próximo domingo a modo de cierre definitivo. Anoche debía tener un interés especial por cuanto suponía el de la final, en este tipo de programas y en el momento especial en que se emiten se debería tener un mínimo de cuidado y preparar los contenidos con un poco de sensibilidad, los nervios están a flor de piel y cualquier detalle por pequeño que sea puede ser visto de forma parcial o imparcial según el cristal con que se mire.

  A estas alturas no podemos decir que nada nos pueda sorprender ya. Volver a reincidir sobre lo mismo cuando llevamos casi tres meses así  dan una pereza tremenda, obviaré la selección de vídeos ya que se ha convertido en un clásico de la edición, han sido partidistas y poco objetivos aparte de totalmente injustos con los concursantes. Aferrarse a que Paula ha sido la que más vídeos ha generado es la excusa perfecta para hacer un mal trabajo. No es que haya sido Paula la que más vídeos haya generado para el programa, ha sido el programa quien más vídeos  ha generado para Paula, es muy sencillo. De un concursante, se puede extraer o seleccionar todo lo malo, hemos tenido ejemplos, de otro se puede seleccionar una sola historia, de otros simplemente todo lo bueno y de otros, lo más gracioso. Combinar lo bueno con lo gracioso y tapar lo malo puede ser objeto de muchas dudas, y esas han estado recayendo sobre la sombra de Paula, siguen, y seguirán. Incluso los malos que ha habido le han dado una imagen favorecedora, bien en plan víctima o bien recalcando siempre la culpa de los  demás. Ha sido increíble la elección de este año ignorando a la mayoría de los concursantes. No se ha sido muy imparcial desde el programa con muchos concursantes.

  Anoche escribí en twitter lo siguiente:  Mientras Paula busca a las cámaras, las cámaras buscan a Alejandra. Esa es la diferencia. Fue la impresión que tuve anoche mientras las veía en el confesionario recordando su paso por la casa y analizando su relación con todos los concursantes. Si alguien pudiera volver a verlo, se lo aconsejo, pues es una muestra audiovisual de enorme valor sobre lo que  digo, y donde se ven las diferencias claras entre una y otra, lo que busca el programa y lo que busca determinado tipo de espectador, la forma en que cada una ha vivido el concurso y lo ha sentido, siempre habrán cosas que nunca pueden mentir ni  objeto de ser adulteradas.

  Hubo muchas anécdotas, a destacar la confesión de Jonathan de que prefiere la opción Paula para ganar, simplemente revelador. O la extraña percepción que tiene Hugo del concepto pareja, quien al salir de casa y ver la cantidad de fans que tenía habría decidido dejar la relación con su novia por si acaso y soltar a los cuatro vientos que prefiere disfrutar del momento. Hugo en estado puro. O porqué no, la decisión del programa de otorgarle el premio carbón del debate a Omar y Luis, negándose éste a salir sin que nadie le dijese nada y comerse Omar todo el marrón. Bien por Luis. Todo un caballero. El programa también estuvo fino y se le vio un poco el plumero. O el enésimo capítulo de la estafa relación Azahara y Juanma, negándose la primera a hablar de Zoe cuando ha estado tres meses con la palabra Zoe en la boca y justificando que todo lo que hacia era en función de aquel. Lo de Juanma tampoco es que tenga que ir más allá de lo que ya ha ido, ni siquiera merece la pena, ambos han sido unos estafadores del concurso y normal que ninguno de los dos hayan llegado a la final. Justicia poética, que lo llamaría alguien.

  Se está preparando todo para el jueves, a las finalistas las han ubicado en aquella famosa “segunda casa” de dimensiones reducidas mientras preparan  el escenario final. No sabremos lo que nos deparará, hablaron de una final de cuento y que a partir de ahora las relaciones entre las tres obligatoriamente habrán de ser más cercanas, eso no siempre tiene que ser bueno precisamente. Ayer de hecho el principio del debate se centró exclusivamente en una tirantez artificiada y sobredimensionada en vez de resaltar el buen rollo ahora existente. Nunca cambiarán algunos. Todos sabemos la difícil relación que han existido entre las finalistas a lo largo del concurso, pero después de tres meses que lo has podido aplicar a tu conveniencia no me vengas ahora, precisamente que se llevan bien, para insinuar justamente todo lo contrario. Para hacérselo mirar. 

  Lo del cuento de hadas, a más de uno le da mala espina, estamos muy susceptibles por todo, no tiene porqué ser así, o no debería ser. Aunque todo pega, y hay que reconocer que como personaje de ficción, o de cuento, como Paula no hay ninguna. Alejandra es mucho más terrenal. Y es que algunos aún viven en los mundos de “Yupi” y como no saben como demostrarlo utilizan los debates del domingo para darle rienda suelta a su imaginación.