De Paula se ha
discutido mil y una veces si la cadena la ha favorecido en el trato recibido, pero
es indudable que si (en su acepción de suposición que no de afirmación) lo
hace, lo hace por algo, porque si la gente no quisiera verla, simplemente no coparía
las imágenes, así que démosle el mérito de conseguirlo. Su expresividad
extremada, su forma de reír, de saltar, de moverse como un remolino nos ha
sacado una sonrisa en mil y una ocasiones y eso es algo importante y que su
extremismo ha inspirado muchos de los guiones diferentes de esta temporada como
el del oso no-zombi o el camino de piñas bebé que son una forma de dar espectáculo.
Luego cada uno le daremos la interpretación que nuestras filias o fobias nos
marquen pero nadie puede negar que llena la pantalla y eso en un concursante es
algo a valorar.
Es una
persona que se muestra de una forma extrema, que en mil ocasiones nos ha dado
muchos momentos para reflexionar y que para mi han sido los mejores por cuanto
en los momentos verdaderamente importantes se muestra una Paula infinitamente
más madura al mismo tiempo que muestra una fragilidad y una fuerza que
sorprende; porque la fuerza no es dejar de ser frágil, es superar esa
fragilidad que te hace sentir las cosas (entre ellas el dolor) intensamente y
seguir adelante sin perder tu personalidad en el camino, que no pierde la
locura de los 20 años. Una Paula que se muestra ligeramente herida cuando cree
que puede perder un amigo pero enormemente resignada, que nos habla de una
situación que tiene asumida; y es que la Paula extrema que muy probablemente
surja también en la calle estoy seguro de que llamará la atención de mucha
gente, pero para la mayoría supone a largo plazo un lastre fuera de los
momentos de juerga por mil convencionalismos que tengamos incrustados y que
pueden ser difíciles de superar como la vergüenza, así que sus amigos son
aquellos que la aceptan como es y son para siempre aunque vengan desde el
vientre de su madre.
Mi primer
problema con Paula es que no me la creo, y eso hace que me replantee todo hacia
ella desde puntos de vista mucho más negativos y que cuando intento analizarla
entren en el puchero muchos ingredientes negativos que me amargan el sabor.
La
desconfianza lleva casi inevitablemente al "piensa mal y acertarás".
Encima es una
persona que le he visto muchos momentos contradictorios que me ponen las
defensas en marcha y para no repetirme voy a tratar algunas de las que aun he
tratado poco.
Paula es celosa incluso de sus amigos (palabras suyas
demostradas en mil ocasiones). Los celos surgen de varias fuentes y le
asignaremos la que cada cual crea que sea suya. Surgen del afán de posesión y
en este caso es una forma de coartar la libertad de las personas. Surgen de la
inseguridad, y en este caso me muestran una debilidad que Paula no ha mostrado
en los momentos mas relevantes o surgen del afán de llamar la atención y por
tanto enlazan con el segundo punto y tampoco me hablan muy bien de ella, por
que o bien es insegura o bien intenta copar cámaras con vista a ganar el concurso
y si es así entonces no es sincera, por cuanto su "grito de guerra"
es: " Yo soy así " y por tanto ella no es así.
Establecido este
importante punto, todo lo demás cae por su propio peso y me hace mirarla con
desconfianza.
Me encantan
las mujeres liberadas sexualmente porque me hablan de libertad, de claridad
mental, de autoestima y de fuerza interior entre otras cosas. Pero.... no
tiendo a confundir liberación sexual e integrarla en el punto de uso el sexo
por interés porque es una fuerza muy importante con los hombres, porque eso no
es libertad sexual, es manipulación a través del sexo.
Y aquí tengo que volver
para atrás a los primeros detalles que me dieron la voz de alarma. Desde que
Paula y Omar empiezan a entablar relación pasan tres días, TRES, antes de que
todas las ideas que comentaba sobre su abuela y que no podía hacer nada se
fueran por la borda. O esa chica es muy rápida tomando decisiones, o bien su
abuela le importa tres narices (una por cada día), o bien quería tomar
importancia en el concurso y copar cámaras, o bien ve en Omar alguien difícil
de conseguir sin meter el sexo en la ecuación y opta por la solución más fácil,
da igual porque todas las opciones son malas.
Su extremismo
a la hora de expresarse me hace pensar en las cámaras y sigue generándome más
dudas, pero si opto por las otras me habla de manipulación de las personas y es
todavía peor la conclusión.
Siguiendo el hilo temporal llega Lucia y la pobre
Paula en las pocas horas que estuvo triunfante tuvo la empatía de un cocodrilo
sádico que se come a un bebé despacito porque los padres miran desde la orilla.
Absorbía a Omar y eso lo podía entender pero la sensación que yo tenía era de
que disfrutaba mientras lo hacia y le daba a las narices a la otra y eso ya no
lo podía entender, porque saca la bondad de la ecuación que para mi supone un
concursante.
Y si a la hora de analizar a Paula sacas la
bondad... lo que queda no es muy agradable.
Siguiendo con el hilo temporal, La
Paula que queda tras la fatídica noche la entiendo y no la juzgo mal, pues los
momentos de dolor, de furia concentrada y de rencor son normales con una
situación como la que se produjo, pero entiendo un poco menos los momentos (que
los hubo), esa “Paula muero de alegría” que se produjeron en nada porque me
hablan de una recuperación prodigiosa o de un papel asumido, pero el
empujoncito es tan leve que ni voy a entrar en él.
Paula recibe
el apoyo de toda la casa y, curioso...
al final lo que se queda es con Luis y al resto… al resto que le den, porque
ella tiene su juguete que le apoya y toma distancia especialmente de la primas
sobre todo de Alejandra que no vaya a ser que le haga sombra y mucho antes de
que las primas se acerquen al clan de Carabanchel. Que sea por celos, porque
las primas no le entran al juego absorbente que practica o por que se centra en
Luis eso ya no lo sé. Pero vuelve al sitio donde se siente cómoda
junto a un
hombre que le permite lo que sea, lo cual, me habla de cualquier cosa menos de
independencia y tampoco me habla muy bien de ella al compararla con la imagen
que vende de chica independiente que se maneja sola y responsable de su vida.
Pero no es nada más que otra incongruencia (y ya llevamos unas cuantas).
Su relación
con Luis ha sido desde luego absorbente y ha generado la mitad de las broncas
de la casa y el pobre Luis ha demostrado una paciencia infinita, que
generalmente es agradecida con reproches y aspavientos salvo en los momentos en
los que la situación de verdad peligra, entonces sale una Paula madura y resignada que
habla, que explica que ella es así y que no puede cambiar y que aunque sea
suavemente exige (que no pide) que se la entienda. Al final como siempre es
Luis el que da el paso que impide la fractura y esto no me habla de firmeza de
carácter, me habla de obstinación que dice: "Pues si no me coges como soy
, te vas al carajo aunque seas la persona mas importante para mi de la casa,
porque al fin y al cabo, yo tengo mi gente fuera" … eso tampoco habla bien
de ella.
Michael